lunes, 19 de septiembre de 2011

Aragón cree que Asturias tiene suficientes osos para exportar ejemplares al Pirineo

Los expertos de Aragón consideran que la población del núcleo cantábrico occidental está «madura» y «ya no hay dudas» sobre su evolución






Oviedo, Raquel L. MURIAS

Aragón quiere llevar osos de la cordillera Cantábrica a los montes del Pirineo para recuperar la población osera de esta zona montañosa. El Gobierno aragonés considera que la población de osos de Asturias está lo «suficientemente madura» para exportar plantígrados a los Pirineos y reclama colaboración, tal y como ellos hicieron al donar dos quebrantahuesos para su reintroducción en los Picos de Europa el año pasado. Así lo asegura el jefe del servicio de Biodiversidad del departamento de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente de Aragón, Manuel Alcántara de la Fuente, en una carta remitida a una ONG francesa que trabaja por la recuperación del oso en el Pirineo y a la que ha tenido acceso este periódico.

Alcántara explica a los conservacionistas franceses que fue a principios de este año cuando el Ministerio de Medio Ambiente les transmitió a todas las comunidades autónomas con presencia de oso la intención de solicitar un programa Life para trabajar en un proyecto conjunto entre la cordillera Cantábrica y los Pirineos para la conservación del oso, tal y como ya avanzó LA NUEVA ESPAÑA. Según el jefe del departamento de Medio Ambiente aragonés, la idea era «reorientar» los fondos que reciben las comunidades autónomas en concepto de subvención para la conservación de algunas especies amenazadas a la conservación del oso y sumar a estas cantidades la financiación que aprobase Bruselas para poner en marcha el Life. «Fue la Fundación Oso Pardo (FOP) la encargada de coordinar la redacción del proyecto», concreta Alcántara.

El traspaso de osos de la cordillera Cantábrica a los Pirineos se contempla dentro de este proyecto porque «si no se incluye algo novedosos es prácticamente imposible conseguir financiación de Bruselas, pero además es que creo seriamente que con el oso no se puede seguir haciendo más de lo mismo, ni en la Cordillera ni en los Pirineos», matiza el experto aragonés. Según Alcántara, «estamos cansados de las quejas sobre la viabilidad del núcleo oriental cantábrico, que siempre se han puesto como excusa para frenar la extracción de animales o cualquier colaboración con el Pirineo. Creo que demográficamente hablando no hay dudas de la evolución del núcleo occidental y de su capacidad exportadora de animales», concreta.

Se refiere el experto aragonés a que la población de oso pardo cantábrico se encuentra distribuida en dos grupos muy diferenciados y que no han evolucionado de la misma forma a pesar de que los esfuerzos han sido los mismos. En la occidental -concentrada sobre todo en el suroccidente asturiano- hay veinticinco osas con cincuenta oseznos, frente a las dos madres que habitan en la zona oriental, donde es necesario que se renueve el flujo genético para revitalizar la población. Los expertos aún no se han atrevido a pasar osos de la población occidental a la oriental para favorecer el cruce genético e impulsar la recuperación del grupo oriental.

Alcántara considera que al igual que Aragón dio a Asturias dos quebrantahuesos para la reintroducción de la especie en el Principado, ahora el Principado debería de apoyar la exportación de osos para lograr recuperar la especie en los Pirineos. El Gobierno de Aragón cedió a Asturias en julio de 2010 dos ejemplares de quebrantahuesos. Uno de ellos, «Leoncia», apareció muerta en abril de este año, pero el proyecto sigue adelante.

En relación al proyecto Life que contempla el trasvase de osos y que aún no ha sido presentado a Bruselas, explica Alcántara que, «la participación de todas la administraciones ha sido intensa, tanto es así que el volumen de acciones y de presupuesto que entre todas ellas se generó resultó incluso excesivo. Así, de un primer borrador de presupuesto en el que se barajaba la cifra de 22 millones de euros, Guillermo Palomero, por indicación del Ministerio, nos hizo bajar las pretensiones a las comunidades autónomas hasta la cifra final que figura en el borrador definitivo, que es de 14 millones, de los que el 75% se pide como financiación comunitaria», remata este responsable de la comunidad aragonesa.

Leer el artículo completo en el diario La Nueva España

domingo, 18 de septiembre de 2011

El MARM estudia la viabilidad de la cría en cautividad de oso pardo

El Ministerio de Medio Ambiente, y Medio Rural y Marino (MARM), junto con las comunidades autónomas de Castilla y León y Asturias, estudia la viabilidad y los beneficios de una experiencia de cría de osos pardos en cautividad con fines de reforzamiento de las poblaciones silvestres o para crear y mantener preventivamente un núcleo de plantígrados en condiciones de semi-libertad. Esta es una de las principales medidas que establece la Estrategia para la Conservación del Oso Pardo, publicada por el MARM junto con las del urogallo y el visón europeo, entre otras, y que pretenden promover e impulsar las acciones necesarias entre todas las administraciones y organizaciones implicadas para eliminar el peligro de extinción al que se enfrentan. Estas estrategias constituyen, además, el marco orientativo de los planes de recuperación y conservación que han de aprobar las comunidades autónomas para las especies consideradas en peligro de extinción, aspecto en el que Castilla y León tiene aprobada una cuarta parte de los planes, según denunció el Observatorio de la Sostenibilidad en España (OSE).
En todo caso y en relación con esta primera iniciativa incluida en el documento para la conservación del plantígrado cantábrico, se elaborará un protocolo de cría en cautividad a través del que se coordinen las actuaciones necesarias, así como los investigadores, gestores y centros implicados. Especial relevancia tiene la población osera oriental cantábrica, que contará con un plan de medidas específico para contribuir a restablecer las deterioradas condiciones demográficas y genéticas que garanticen su viabilidad.
Igualmente, la estrategia pide delimitar con precisión el corredor entre las dos poblaciones de osos cantábricos, en sus vertientes asturiana y leonesa, e identificar los elementos que puedan actuar como barrera o dificultar la dispersión de ejemplares en el corredor interpoblacional, así como en otras vías inventariadas en catálogos oficiales. El objetivo final es garantizar la conectividad entre zonas oseras, dado que desde las primeras décadas de este siglo los osos pardos se distribuyen en la Cordillera Cantábrica en dos poblaciones que posiblemente están incomunicadas, hecho que se confirma en estudios genéticos: población occidental y población oriental.
La primera de ellas se extiende por Asturias, Castilla y León y Galicia, desde los Ancares de Lugo, por el oeste, hasta el Puerto de Pajares, por el este. Abarca unos 2.600 kilómetros cuadrados, sobre todo en el Principado, con cerca del 70 por ciento de la superficie. Por su parte, la población oriental se extiende por unos 2.480 kilómetros cuadrados, desde Campoo de Suso (Cantabria), al este, hasta el Puerto de Vegarada (Asturias) por el oeste. Afecta a Castilla y León, Cantabria y Asturias, pero en torno al 85 por ciento de la superficie ocupada pertenece a la Comunidad castellana y leonesa.
Leer la noticia completa en el diario El Mundo

viernes, 9 de septiembre de 2011

Muerte digna para la abuela de los osos cantábricos



La abuela osa se sentía vieja, muy vieja, y un día de este verano decidió que ya no merecía la pena seguir viviendo. 25 años eran demasiados para sus debilitados huesos. Desdentada, famélica, cegata, sola y deprimida, se tumbó bajo un viejo roble de la Montaña Palentina a la espera de esa muerte tranquila reservada tan sólo para unos pocos afortunados.
Pero llegaron los hombres, esos de los que toda la vida había estado huyendo, y en vez de aprovecharse de su invalidez para rematarla decidieron ayudarla.
“La Güela” no sintió el pinchazo del anestésico y cuando despertó el bosque se había transformado en refugio artificial. Tan artificial como esas papillas energéticas que en dos meses le han devuelto las ganas de vivir, aumentando sus apenas 53 kilos en los actuales 104 kilos.
Con muy buen criterio, los responsables de la Junta de Castilla y León han decidido que el viejo animal, ya recuperado, debe volver a sus bosques palentinos. Allí ha sido liberada la pasada semana, en la seguridad de que morirá pronto pues está concluyendo su ciclo vital.
Aguantará un otoño que viene cargado de hayucos, castañas, bellotas, avellanas, moras y setas, pero quizá muera cuando llegue el invierno y se recoja en una cueva para hibernar. Nacida libre, morirá libre y feliz en esas montañas donde sobreviven apenas 30 ejemplares de la muy amenazada subpoblación oriental de oso pardo cantábrico, muchos de ellos familia suya.
La vieja osa lleva un collar con GPS que permite seguirla 24 horas al día. Sus primeros movimientos fueron cansinos. Tras ser liberada se sentó varias horas bajo una mata de roble, pues la anciana necesitaba tiempo para recuperarse del viaje y de la anestesia. Pero después demostró su buena forma física caminando dos kilómetros hasta el robledal donde pasó su primera noche en libertad.
A partir de ahora el futuro es sólo suyo. Los técnicos seguirán sus pasos pero han decidido no volver a intervenir aunque esté muriéndose. ¿Te parece justo? A mí sí que me lo parece. Morir es ley de vida y la vieja osa afrontará el trance con valentía. Porque como decía Gandhi, “la muerte no es más que un sueño y un olvido”. 
Leer la noticia completa en La Crónica Verde, del diario 20 minutos.